Seguidores

sábado, 21 de abril de 2012

Aquel gran amor...

Un te quiero suspendido en el aire. Sin una respuesta. Ocho letras que podían cambiarlo todo, absolutamente todo por completo. Acompañado de un pequeño escalofrío que invadía todo el cuerpo. Y que no falte todo el dolor del mundo, cuando ves que ya está hecho y no hay salida, ya está dicho. Un te quiero que llegó, pero nunca fue respondido.





No hay comentarios:

Publicar un comentario